El tarot, que tanta fascinación causó en el mundo del esoterismo del siglo XIX, surgió en pleno Renacimiento italiano. Sus símbolos representan el camino esencial del ser humano, que busca la salvación a través de las vicisitudes de la existencia.
Utilizado actualmente como herramienta de guía espiritual o bien como complemento en el área del coaching y el trabajo creativo, el modelo «Tarot de Marsella» procede de la artesanía francesa del siglo XVII y es la matriz que ha dado origen a la gran mayoría de los tarots existentes hoy en día.
